Los mejores videojuegos de SEGA

En sus comienzos, la industria de los videojuegos contaba solo con un par de compañías que, o bien desarrollaban títulos, o bien los distribuían, pero muy pocas hacían ambas tareas a la vez. Y cuando uno piensa en alguna marca que ha estado desde el comienzo contribuyendo al desarrollo del sector, una de las posibilidades que se le pasa por la cabeza es, sin duda alguna, la japonesa SEGA, que el pasado octubre cumplió 60 años trabajando incansablemente por llevar al mercado los mejores juegos.

A continuación, repasamos los grandes éxitos de la historia que han pasado por las manos de la empresa asiática y que han trascendido en el imaginario colectivo de los amantes de los videojuegos.

Crazy Taxi

Nació en 1999 para las máquinas arcade para, rápidamente adaptarse a Dreamcast.

El funcionamiento del juego es sencillo: manejabas a un taxista entre 4 personajes diferentes y tenías que recoger y llevar a clientes por un mapa bastante grande y repleto de coches.

El objetivo era conseguir la máxima puntuación posible antes de que se agotara el tiempo, que se podía prolongar cuando superáramos determinados desafíos. Estos se obtenían haciendo más viajes y dando piruetas con el vehículo.

Era un título sencillo que logró cautivar al público precisamente por eso: ofrecía diversión sin necesitar demasiado tiempo para aprender a jugar y, con el sistema de puntos, hacía posible que grupos de amigos compitieran entre ellos para ver quién era el mejor.

Además, en su banda sonora había grupos tan conocidos como The Offspring y Bad Religion.

Total War Roma II

Los amantes de los juegos de estrategia no tienen ninguna duda: la saga para ordenador Total War es una de las mejores que se han hecho a lo largo de la historia. Es la secuela de uno de los videojuegos más laureados de comienzos del siglo XXI y consiguió mantener su esencia y multiplicar todas las posibilidades jugables y mejorar su estilo gráfico.

Este RTS (Real time strategy) es tan complicado como entretenido, ya que te obliga a invertir una gran cantidad de horas para aprender a desenvolverte por el mapa y manejar al ejército durante los combates.

Uno de sus puntos fuertes es la posibilidad de revivir la historia de la Antigua Roma, ofreciendo a los jugadores varias decenas de facciones para manejar y rememorar con ellas batallas y momentos cruciales de la época.

A eso, habría que añadirle las cientos de rutas que puede tomar la trama a partir de las decisiones que tomes en los puntos importantes de esta, lo que le confiere una profundidad incontestable.

Sonic Manía

Las aventuras del erizo azul tenían que estar sí o sí en la lista, y como es casi imposible elegir cuál es el mejor título de todos, nos quedamos con una recopilación que salió para Switch, ordenador, Xbox One y PlayStation 4 que se lanzó al mercado en 2017.

Los juegos de plataformas de Sonic fueron y siguen siendo una inspiración para los desarrolladores de videojuegos. De hecho, es uno de los grandes iconos de SEGA, que vio en él un éxito con el que continuar creando obras hasta hoy día.

El objetivo era bastante simple: llegar al final del nivel esquivando todos los obstáculos y consiguiendo el máximo número de anillas de oro. Simple y apto para todo tipo de públicos.

Shenmue II

Se lanzó al mercado en 2001 para la Dreamcast y para Xbox, y tuvo tal recepción que casi 15 años después realizaron una remasterización para las consolas de la época. El título nos presentaba un argumento rompedor para la época, una historia de venganza que pone los pelos de punta a aquellos que se meten de lleno en ella.

Fue una de las grandes influencias de principios de los 2000, ya que el personaje recorría largos escenarios y tenía infinitas posibilidades de interacción.

Sus múltiples minijuegos, su narrativa y el sistema de combate son las grandes bazas de esta obra.

Duke Nukem 3D

El título pertenece a la saga del carismático agente Duke Nukem. Desarrollado en 1996 para ordenador, Nintendo 64 y MegaDrive, destacó sobre sus predecesores por un sistema de niveles muy novedoso y una ristra de rompecabezas que logró romper con la acción y disparos de las entregas clásicas.

Las armas que estaban a disposición del jugador eran muy variadas, así como los enemigos a los que tenía que enfrentarse.

A todo lo anterior hay que sumar una recreación de los escenarios bastante buena para las posibilidades de la época y un sistema multijugador para hasta 8 personas que era muy divertido y podía tener embaucado a un mismo grupo de amigos.

Quake III Arena

Uno de los shooters más exitosos de finales del siglo XX. Este título de disparos en primera persona estaba pensado solo para jugarse en multijugador, por lo que fue un éxito para las lan party de la época y se organizaron sonadas competiciones que fueron la semilla de los hoy ya germinados esports.

Fue uno de las grandes revolucionarios del género FPS (siglas en inglés de disparos en primera persona) que se enfocaba principalmente en la habilidad de los jugadores olvidando por completo el diseño bonito de los escenarios.

No era un título muy complejo, pero al haberse extendido rápidamente por todo el mundo obligó a muchos a entrenar para ponerse al nivel del resto de la comunidad, lo que mejoró el ecosistema competitivo y lo convirtió en uno de los más queridos del momento, con un nicho de jugadores 20 años después de su lanzamiento.

Periodista especializado
Colaborador de MAPFRE