Kingdom Hearts Melody of Memory, la llave espada más musical

Kingdom Hearts es, sin ninguna duda, una de las sagas de videojuegos que más títulos ha sacado en todas las plataformas habidas y por haber: PlayStation 2, 3 y 4; Gameboy Advance, Nintendo DS, 3DS, móviles, Xbox One y, por último, también llegará a Nintendo Switch.

Aunque, precisamente, esta última adaptación será bastante diferente a las que hemos visto hasta ahora: será un juego de acción a partir de ritmos, en el que los jugadores tendrán que seguir la música presionando determinados botones cuando se les pidan.

Así, si habías olvidado una parte importante de la historia de la saga y tenías en mente revivirla, Kingdom Hearts: Melody of Memory es la mejor opción posible, ya que repasa toda la trama, desde el primer al último videojuego, y la forma de afrontarlo será sustancialmente distinta a las entregas anteriores.

De esta manera, Square Enix y Disney han vuelto a ingeniárselas para nutrir su extensa biblioteca de títulos de una trama que casi tiene 20 años.

Sora blande su llave espada al ritmo de la música

Uno de los elementos que más destacaba de la saga Kingdom Hearts, además de la presencia de los personajes de Disney, de una jugabilidad cambiante en cada entrega y de una historia enrevesada y complicada de seguir, pero que llegaba al corazón, era una banda sonora emotiva y que sabía adaptarse a las circunstancias de la narrativa.

Dearly Beloved, Simple and Clean o Hollow Bastion, por mencionar solo algunas de las más conocidas, suenan en nuestra mente retrotrayéndonos a los acontecimientos en los que se enmarcaban.

Y por eso, la idea del juego luce a la perfección. En esta ocasión, esa melodía no es solo un fondo que nos atrapa, es la que marca el ritmo inmediato de la acción: Sora, Donald y Goofy —más adelante podremos cambiar a nuestros acompañantes— avanzan sobre un escenario sin pararse sobre las tres líneas centrales del pentagrama mientras que hordas de diferentes enemigos se interponen en nuestro camino.

No podremos atacar sin más, sino que hemos de esperar al momento adecuado de la canción: a ello nos ayudará el clásico círculo con el que fijábamos a los enemigos, que se irá haciendo más pequeño cuanto más nos acercamos.

Otro círculo se aproximará a él y, cuando coincidan, hemos de efectuar el ataque. Si no acertamos, dependiendo de la distancia, o bien perderemos vida o conseguiremos menos puntos.

Estos luego podrán invertirse en mejorar estadísticas del personaje, como la defensa, la fuerza y los puntos de vida.

A priori, no entraña demasiada dificultad, pero en el momento en que hay un enemigo en cada línea o estos se suceden rápidamente, la cosa se complica bastante porque, aunque Sora es el protagonista y el que manejamos principalmente, a nuestros compañeros también hemos de coordinarlos, usando los gatillos para ello.

Saltar podrá salvarnos de algún apuro, pero en ciertas situaciones tendremos que saltar y atacar a la vez: incluso planear para conseguir las notas musicales que actúan como objetos coleccionables.

Kingdom Hearts, nostalgia y amor

Al principio cuesta hacerse a la idea del videojuego, pero ya seas un amante de los juegos musicales o de la saga Kingdom Hearts, siempre encontrarás un motivo para seguir, por mucho que te quedes encasquetado en un nivel.

El último juego de la saga tuvo bastantes críticas al respecto de su dificultad, por eso en esta ocasión no han escatimado en posibilidades y han ofrecido tres niveles escalonados: principiante, normal y experto.

Pero Kingdom Hearts: Melody of Memory no está pensado para jugarse exclusivamente en solitario. Hay dos opciones para el multijugador: cooperativo, en el que podremos revivir los momentos más significativos y que más nos marcaron de la trama; y duelos, donde podremos enfrentarnos a nuestros amigos para demostrar quién tiene más ritmo.

Sin duda, Square Enix ha sabido crear una obra resumen que se diferencie bastante de lo que hemos podido ver hasta ahora. Sabemos que estar al día en la historia de la saga es difícil, pero gracias a este título musical y al desafío constante de superarnos en la armonía y en el orden musical, podremos recordar los momentos más importantes sin tener que rejugarlos todos.

Porque si algo sabe manejar a la perfección la compañía japonesa respecto a la franquicia es la nostalgia, algo que se sacia muy bien con este videojuego sin tener que recurrir al fanservice ni a la remasterización, algo que ya tienen bastante quemado.

Periodista especializado
Colaborador de MAPFRE