RTX 3080, la nueva gráfica de Nvidia para jugar en PC a 4K
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Nvidia revolucionará el apartado gráfico de los videojuegos con su nueva tarjeta RTX 3080, que promete juegos a 4K con el mejor rendimiento imaginable.
2021 no será solo el año donde las consolas de nueva generación irrumpan en el mundo de los videojuegos y las nuevas tecnologías. PlayStation 5 y Xbox Series X no serán las únicas novedades que hagan que toda nuestra experiencia anterior con los videojuegos caduque con rapidez.
El pasado septiembre, Nvidia presentó sus tarjetas gráficas de nueva generación, la RTX 3080 y la RTX 3090, artilugios que prometen llevar a nuestros dispositivos una calidad de imagen real y óptima para disfrutar del 4K.
Ambas gráficas prometen cumplir el sueño de los desarrolladores de la primera época. Sus 8.704 núcleos CUDA, frecuencia de 1.710 MHZ y 10 GB de memoria VRAM supondrán una auténtica ruptura con lo que conocemos hasta ahora.
De hecho, es casi imposible atisbar cómo podrán verse los juegos en su máximo rendimiento, más allá de que podamos imaginar que tecnologías como el raytracing rendirán mucho mejor que en la RTX 2080, por ejemplo.
La respuesta por parte del público de ordenadores ha sido increíble. En tan solo un mes, han agotado el stock para el resto del año y la compañía ha avisado de que, si no se ha realizado la reserva ya, será muy complicado encontrar una para antes de 2021. Y su precio no es precisamente bajo: 719€ para la 3080 y 1.549€ para la 3090.
Características técnicas de la RTX 3080
Estas son las principales prestaciones a tener en cuenta de la nueva gráfica de plata de Nvidia:
- Memoria: 10GB GDDR6X
- Motor Gráfico: GA102 Nvidia Ampere
- Bus: PCI Express 4.0.
- Interfaz de memoria: 320-Bit
- Frecuencias base: 1440 MHz
- Frecuencia Boost: 1710 MHz
- Velocidad de la memoria: 19Gbps
- Soporte HDCP: 2.2
- Consumo TDP: 350w
- Conectividad: DisplayPort x 3 (v1.4a) / HDMI 2.1 x 1
- Fuente de alimentación recomendada: 750w
Gracias a los nuevos RT Core, el hardware del ordenador podrá soportar el Motion Blue, un efecto que reduce aún más la línea que separa al cine de los videojuegos al difuminar el entorno tridimensional cuando el usuario que manejamos se mueve rápido en el escenario y los objetos y elementos visuales que se van desplazando sobre nuestra retina dejan un pequeño rastro, eliminando así el incómodo fotograma fantasma en el que algunos objetos que se cruzan ante nosotros y los que dejamos atrás se superponen.
Este efecto está centrado en aportar mayor realismo al entorno y podrá verse a su máximo nivel en juegos de disparos. Títulos como Call of Duty: Black Ops Cold War o Cyberpunk 2077 podrían ser buenas primeras tomas de contacto.
Sobre todo, donde mejor notaremos la evolución será en el rendimiento de los videojuegos. El DLSS de Nvidia, una tecnología propia que optimizaba las prestaciones de la IA en cuanto a su proyección gráfica y permitía que elementos lejanos que quizá estaban difuminados ahora puedan recogerse a mayor calidad.
En este caso, las tensor y shaders que la formaban nos presentarán imágenes con más detalle y resolución sin tener que aumentar el tiempo de carga y con la mitad de los píxeles
Esta última posibilitará que se elimine el ruido en las imágenes y vídeos que se nos presentan y será muy útil para los creadores de contenido, que ahora podrán proyectar fondos virtuales en sus cámaras.
PC vuelve a ganarle la partida a Xbox y PlayStation
Las nuevas generaciones de Sony y Microsoft salieron con la esperanza de recortar la distancia entre las consolas y los ordenadores. Y durante un tiempo, todo parecía indicar que podría ser así, aunque el anuncio de Nvidia fue un jarro de agua fría para los que pensaban así. Las nuevas gráficas de Nvidia son, probablemente, las que más han evolucionado respecto a sus predecesores.
Las consolas prometían reducir al máximo posible los tiempos de carga y estas nuevas gráficas parece que incluso pueden ponerle fin, dentro de las medidas de lo posible. La RTX IO permitirá que estos casi desaparezcan al descargar la labor de descomprimir los contenidos en pantalla desde la GPU.
Otra de las grandes noticias que traerá la RTX 3080 es un sistema de ventilación mejorado que hará más fácil controlar su temperatura cuando esta esté rindiendo al máximo.
Cuando uno mira el precio de la gráfica puede pensar que es excesivamente caro, que lo es. Pero en contexto, uno solo tiene motivos para alegrarse. A pesar de que la evolución es enorme y de que las prestaciones se han multiplicado, su precio de salida es menor que su predecesora, la RTX 2080, que se lanzó por un módico precio de 849€.
Eso sí, el resto de elementos del ordenador e incluso el monitor deberán soportar las nuevas tecnologías y prestaciones de la gráfica, por lo que quizá también tengamos que mejorar el resto de componentes.
El futuro de los videojuegos es próspero y su avance, de vértigo. Los avances llegan con rapidez y cada vez la experiencia de juego es más realista e inmersiva.
Periodista especializado
Colaborador de MAPFRE