Blasphemous, el indie español más esperado de la década

Estética clásica con tintes de Metroid y Castlevania, símbolos católicos, clara influencias de Dark Souls, reminiscencias de la Semana Santa de Sevilla, sangre y vísceras a borbotones… Blasphemous parece unir elementos, a priori totalmente diferentes, en un universo en el que lucen a la perfección.

La prueba de que ha tenido un magnífico recibimiento por el público la encontramos en su KickStarter: menos de un día tardaron en conseguir 71.000€, una cifra nada desdeñable para un videojuego indie español. Pero más abultado fue el dato final: 302.000€. Dos años después, el título no solo saldrá para ordenadores, sino que también lo hará para Switch, PS4 y Xbox One.

Los retrasos del lanzamiento de la obra no enfadaron a los usuarios por una razón: se buscaba alcanzar la máxima calidad posible, y bajo esta premisa todo es incuestionable. Precipitarse habría conllevado decepcionar a aquellos que habían hecho posible Blasphemous, de ahí la decisión de posponerlo. “Tuvimos que improvisar algunas promesas que se nos han atragantado muchísimo para poder cumplirlo”, aseguraban desde la desarrolladora.

El lanzamiento de la demo en Steam ha confirmado varios elementos de esta particular plataforma en dos dimensiones al estilo pixel art.

La tensión de ser uno de los indies más esperados del momento se incrementa si se parte de la base de que han tardado 3 años en desarrollar el juego. Según aseguró Enrique Colinet, uno de los integrantes del estudio, en el programa Reconectados, “la mayor presión que tenemos es la propia industria del videojuego español”. Otro problema importante al que se enfrentaron fue que Bloodstained, otra de sus influencias, saliera al mercado en junio, tan solo unos meses antes que Blasphemous.

Trailer

El título mezcla la velocidad de un plataformero con el estilo de combate de hack-n-slash. Su diseño de niveles no es lineal, por lo que podrás elegir por dónde avanzar y cuándo hacerlo. La cantidad de combos y movimientos del personaje hacen que además la acción sea variada y no se enquiste en un rango pequeño de ataques, restándole monotonía al gameplay.

Narrativa

Su narrativa también es un elemento estructural que ha llamado la atención. Se narra la historia de ‘el Penitente’—la primera clara influencia a la cultura cofrade sevillana— el único superviviente de una terrible maldición llevada a cabo por el Alto Pontífice, convertido en un monstruo gigante, en forma de árbol, que acaba con la población y con la hermandad Lamento Mudo: ha sacudido el mundo de Cvstodia y sus ciudadanos para someterlos a un tormento.

Personajes

El protagonista, atrapado en una condena similar a la de Prometeo, de muerte y resurrección, se arma para salvar a los supervivientes y llegar a la raíz de la situación.

Todo el aura que envuelve al juego es eminentemente religiosa: los accesorios son Rosarios, reliquias, plegarias o corazones de espada, hay crucifijos por todas partes, los enemigos parecen ser una secta, hay almas desamparadas por el camino que te piden ayuda…

Los enemigos también siguen estas características: el flagelante, la monja, el condenado, la procesión, etc.  De hecho, incluso uno de los jefes finales de sala parece ser un típico Jesús de Nazaret de porcelana de cualquier casa antigua, sostenido por una silueta de madera.

Y todas las influencias de la cultura local de Sevilla no solo son fácilmente reconocibles, sino que los desarrolladores la exponen de forma clara e invitan a los jugadores a visitar la ciudad andaluza y comprobarlo por ellos mismos.

En su perfil de Kickstarter hay un cuadro de Francisco Goya, ‘Procesión de Flagelantes’ en el que se puede distinguir muchísimo de lo que luego se verá en el juego: los látigos, los capirotes de los procesionarios—que lleva el protagonista—, las Vírgenes, etc.

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“En Blasphemous nos hemos impuesto un reto artístico: ¿podemos crear un mundo fantástico oscuro que sea universalmente atractivo, pero también profundamente inspirado en los iconos más significativos de nuestro folclore?”, se preguntan.

Para el diseño de la banda sonora contaron con Carlos Viola, compositor premiado por The Last Door y otros títulos de renombre y que parece adaptarse a la perfección con la atmósfera que precisamente quiere transmitir el juego sin imitar los clásicos sonidos asociados con la temática.

Entre los muchos premios que ha conseguido la desarrolladora con el título, se encuentra una nominación de IGN al mejor plataformero del E3 2019, mejor juego en desarrollo de Gamelab 2018, mejor juego del MangaFest 2017 y mejor juego cultural  Comunidad de Madrid de 2017.

Sin duda, el título pondrá en el mapa una ciudad ya reconocida internacionalmente como es Sevilla, ante un público que quizá nunca ha tenido la oportunidad de acercarse a ella. Si tú también piensas aprovechar y visitarla, recuerda confiar en MAPFRE para que ningún inconveniente te impida disfrutar perdiéndote por las calles de la capital hispalense.