Los mejores videojuegos de mundo abierto de la década

El videojuego de mundo abierto es uno de los fenómenos con éxito del sector más recientes. Casi inexistentes antes del 2000 y con solo un par de buenas iniciativas hasta 2010. Fue en el comienzo de la segunda década cuando, tras la llegada de las nuevas consolas y posibilidades técnicas y gráficas, estos pudieron brillar.

Cada día es más habitual encontrar en la biblioteca títulos que se categorizan como sandbox o mundo abierto, palabras que, aunque parezcan sinónimas, tienen ciertas diferencias. El primer concepto alude a las obras en las que la relación del usuario con el entorno es casi infinita y juega un papel esencial, mientras que la segunda se refiere simplemente a juegos que se desarrollan en entornos gigantescos.

Uno de los primeros precedentes en el sector fue GTA III, que abandonó el estilo 2D y se embarcó en un proyecto nuevo que se convertiría en una influencia esencial para el futuro. Después llegarían Mafia 2, Los Simpsons: hit y run, Spiderman IV o GTA IV. Poco a poco estas obras conseguían recrear mejor escenarios grandes y métodos para desplazarse en el mapa. Fue con la etapa final de PS3 y Xbox 360 cuando los mundos abiertos lograron explotar.

Desde entonces, son muchas las obras que se han lanzado al mercado con un éxito espectacular. A continuación, repasamos cuáles son las mejores y la razón de su éxito.

Assasin’s Creed Odyssey

Probablemente, el mejor Assassin’s Creed que se ha hecho desde los primeros 4. Bebe mucho de su predecesor, el Origins, ya que fueron los primeros mundos abiertos enormes desde la experiencia del primero, algo más humilde y limitada por la tecnología de la época.

El apartado jugable de esta obra es excelente: un personaje con 3 diferentes árboles de habilidades completo, un sistema de combate entretenido, un mapa de la Antigua Grecia cuya recreación es muy minuciosa y una buena historia que sabe tenerte intrigado desde 0 y que tiene varias bifurcaciones. Si te gusta la historia y lo clásico, apúntate este título en la lista de recomendados. Eso sí, ten en cuenta que podrás echarle horas y horas, por lo que no tengas prisa para acabarlo.

The Legend of Zelda: Breath of the Wild

Es difícil encontrar un videojuego que estrenara tan bien una consola como este Zelda a la Switch. De hecho, se llevó el título de Juego del Año 2017. Los desarrolladores triunfaron a pesar de la dificultad de romper con un modelo que le había traído tantos éxitos a la compañía japonesa.

Consiguió conquistar los corazones de muchos por su estilo gráfico desenfadado pero detallado y con personalidad propia, una historia muy completa y que siempre ofrece más de lo que crees, armas de todo tipo, escenarios recónditos pero que tienen algo que contar y una jugabilidad a priori fácil de manejar pero que te obligaba a adaptarte a cada rival. Su precuela está prevista que llegue a lo largo del próximo año, si no se retrasa.

Grand Theft Auto V

Todo lo que se podía contar de GTA V ya se ha dicho. Fue la primera prueba tangible del potencial que tenían los videojuegos de mundo abierto. 9 años después de su lanzamiento, todavía continúa copando los primeros puestos de los videojuegos más vendidos, hecho que demuestra que no solo no está envejeciendo, sino que encaja en las generaciones de consolas venideras.

En términos de jugabilidad no es muy diferente al anterior, pero tanto el mapa como los elementos con los que pueden interactuar los protagonistas se mejoraron bastante. Aunque la historia de los tres protagonistas es buena, no consiguió igualar el carisma ni el mensaje que se desprendía en GTA IV.

Spiderman

Insomniac Games tenía una difícil tarea: conseguir que todos los jugadores se sintieran como el héroe arácnido. Tras convertirse en un fenómeno de ventas y con una precuela a las puertas, parecen haberlo conseguido. Pasear por los cielos de Nueva York de edificio en edificio es una de las mejores sensaciones del título, pero por supuesto no la única.

Su sistema de combate es perfecto, la variedad de villanos a los que enfrentarnos es extensa y la historia de la entrega, casi inmejorable. La recreación de la ciudad y de un sinfín de NPC que se comportan de forma natural ayudaron a que la inmersión fuera magnífica. Aprender a desplazarse con las telarañas era complejo, pero el resultado final hacía que las horas de entrenamiento mereciera la pena.

The Elder Scrolls V: Skyrim

Junto a GTA V, fue uno de los grandes éxitos que dio comienzo a una era donde el género empezó a brillar con luz propia. La libertad de movimiento, de hacer la misión que te plazca y de disfrutar del videojuego a tu manera se hizo evidente a partir de esta gran obra, que comenzó a hacerse popular a la par que el fenómeno de los streamers.

La magia de este Skyrim era su gran capacidad de hacerte partícipe de la historia, de sentir que estás representando el papel de héroe y de que puedas asemejarte a él todo lo que quieras. Fue la primera gran piedra para los videojuegos donde el rol es una parte imprescindible. Todos llegamos a ser en algún momento Dovahkiin, por eso hay tantos Dovahkiin como jugadores de The Elder Scrolls V: Skyrim. La idea que subyace del juego es simple, pero llevarla a cabo con tanta complejidad será un mérito del que Bethesda siempre podrá presumir.

Periodista especializado

Colaborador de MAPFRE