Los romances más entrañables de los videojuegos
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No todo son enemigos, peleas y grandes batallas: estos son los romances de los videojuegos que removieron nuestro corazón y nos hicieron creer en el amor.
Si hay algo que muchos suelen olvidar sobre los videojuegos es que tiene una capacidad para generar universos narrativos profundos, completos y muy bien trenzados. Y ya no hablamos solo de ciencia ficción, con ejemplos como Mass Effect o Bioshock. Estos también nos han dejado historias enternecedoras de superación y de amor que acabaron contagiándonos y removiendo las mariposas de nuestro estómago.
A continuación, te dejamos una lista con las mejores relaciones de amor de los videojuegos de las últimas décadas de las que no necesariamente tenía que girar toda la trama.
Las mejores parejas de los videojuegos
Tidus y Yuna — Final Fantasy X
Tenía que estar sí o sí en esta lista. Es probablemente la relación más fuerte y congruente de toda la saga: la escena del lago en la que Yuna se lanza al vacío con Tidus y acaba llorando de la impotencia por la imposibilidad de quedar libre de su matrimonio concertado es impactante. La ternura con la que Tidus besa a Yuna para ayudarle a superar el momento sigue marcando uno de los momentos románticos más impactantes del videojuego.
La batalla contra Sinh dejó al público impactado: el “te amo” que lanza Tidus antes de acabar en el Etéreo sigue haciéndonos llorar incluso 20 años después.
Bayek y Aya — Assasin’s Creed Origins
Separados por el asesinato de su hijo en el que cada uno buscaba la venganza por su cuenta, esta temible pareja egipcia volvió a reencontrarse para trabajar conjuntamente en derrotar a aquellos que sometían al pueblo. La pérdida de un descendiente siempre afecta a la estabilidad de las familias, pero esta acabó haciéndose más fuerte y acabaron sentando las bases del Credo de Asesinos, con la que consiguieron neutralizar el mal que asolaba a su tierra.
Ethan y Madison – Heavy Rain
En Heavy Rain, el dicho “cuando se cierra una puerta, se abre una ventana” es más real que nunca. Ethan Mars, abandonado por su mujer tras el asesinato de su hijo, se recluye en casa víctima de agorafobia. Después conoce a Madison Page, periodista que sigue los casos del asesino de su hijo, con la que acaba entablando una relación de amistad que ayudan a aliviar el dolor y la pena de Ethan. En función de las decisiones que tomemos durante la partida, esta relación incluso puede ir a más.
En un videojuego tan oscuro y con tanto dolor, las escenas de amor de ambos acaban arrojando algo de luz entre tanto misterio pesadumbre.
Chloe y Max — Life is Strange
Se conocieron en el colegio y dejaron de verse ya que una de ellas se marchó de la ciudad. Al regresar, pudieron retomar la relación rápido, como si el tiempo no hubiera hecho mella en ellas. Su relación no está precisamente a salvo de problemas y juntas han de hacer frente a situaciones que alumnas de instituto no están capacitadas para afrontar.
El amor entre ambas es tan fuerte, tan inocente, tan real que pesa incluso más que la vida de todo un pueblo. Lo
Ellie y Riley — The Last of Us 2
El mejor ejemplo de que, incluso en los peores momentos de la humanidad, el amor puede llegar a florecer. Juntas, hacen lo imposible para encontrar al asesino de Joel, para lo cual tienen que superar infinitos obstáculos… y no hablamos solo de zombis. La escena del beso es una de las más recordadas de la industria del videojuego.
Johnny Wyles y River — To the Moon
Otro videojuego en el que difícilmente no pasarás el mejor rato llorando. Johnny fue capaz de mirar a River con ojos diferentes que el resto de compañeros de clase, que se reían de la joven por su síndrome de Asperger. Tras su boda, celebrada cerca del faro, a River le diagnosticaron una grave enfermedad, por culpa de la cual acabó falleciendo. Johhny dedicó su vida a tratar de viajar a la luna con el único deseo de reencontrarse con ella. Al final, acaba construyendo la casa junto al faro, donde ambos acabarían enterrados juntos.
Periodista especializado
Colaborador de MAPFRE