Bandas sonoras de videojuegos retro

Es imposible no sonreír cuando echamos la vista atrás y recordamos la época en la que disfrutábamos de pequeño jugando a las consolas. Un golpe letal de nostalgia. Las bandas sonoras de videojuegos retro están intactas en nuestra memoria y cada vez que volvemos a escucharla podemos recordarnos con todo lujo de detalles sentados frente a una pantalla. ¿Cuáles eran las mejores? Las repasamos en este listado.

Aunque parezca que no, la música siempre ha sido un aspecto determinante en los videojuegos. Si bien no brillaban tanto como los gráficos o la jugabilidad, el hecho que fueran destacadas y encajaran a la perfección con lo demás era un elemento que mejoraba exponencialmente la experiencia de juego. A continuación, te mostramos cuáles son las más míticas.

La mejor música retro de videojuegos

Street Fighter II

¿Cómo pueden hacer épica la música hasta de la pantalla de selección de personaje? Éramos muchos los que esperábamos hasta el final de la canción para elegir al luchador… y de hecho, más allá de los trucos y de las habilidades, a veces escogíamos a uno u otro por la canción que usaba de fondo, como pasaba con Ryu, Ken y Guile, por poner algún ejemplo. Jugaras donde jugaras, disfrutar de este auténtico clásico de peleas siempre fue una gozada… y además, creó una enorme comunidad que todavía sigue fiel al género.

Mega Man II

Los que tenían la NES no podrán olvidar jamás esta obra. Un plataformas de acción muy entretenido y que te dejaba embobado frente a la pantalla con una música tan frenética y emocionante. Algunas son muy destacadas, como la del nivel del hombre burbuja o la que sonaba cuando obtenías un arma nueva.

Zelda II: The Adventures of Link

Esta canción en concreto ha pasado a la historia como la principal de la franquicia… y todos sabemos por qué. Ha sabido adaptarse a la perfección a los avances tecnológicos y a las diferentes entregas y sabe anticiparnos toda la acción y aventuras que nos espera. Este título en cuestión no era el mundo abierto que es ahora, pero sí supo conquistarnos con un mapa gigante y una libertad de movimiento que, para aquella época, era fascinante, algo que también confundió a aquellos primerizos acostumbrados a hacer lo que el juego les pedía.

Sonic the Hedgehog

¡Cómo se disfrutaba el Sonic! Era increíble jugar solo o acompañado de tus amigos con una banda sonora que, solo de escucharla, te ponía de buen humor. Especialmente la del nivel ‘Green Hill’ es fabulosa, pero cualquiera otra levantaba la moral a cualquiera.

Tetris

Todo el mundo recuerda la melodía de este clásico, incluso cuando quizá la hayan oído solo un par de veces. Esta entrega en concreto está inspirada en la cultura rusa y fue realizada por Brad Fuller, encargado de otras composiciones de Atari. Es una maravilla de principio y a fin que te ayuda a pensar con mayor velocidad para encajar las piezas en el lugar correcto.

Ducktales

Conocidos en España como Patoaventuras, era el juego de la serie de dibujos protagonizada por el tío Gilito y sus tres sobrinos. Su jugabilidad era muy parecida a los Super Mario de la época, salvo que no era lineal y tenía más mecánicas, lo que le valió una excelente crítica por parte de la prensa y de los jugadores. Su banda sonora precisamente contribuyó a aquella fama, un título que siempre se olvida que fue auspiciado por Capcom.

Contra

Imposible no escuchar su música del menú principal y no acordarte de aquellas tardes de verano jugando con tu amigo y maldiciendo a los enemigos que te dejaban a las puertas de un nuevo nivel. El juego era una maravilla: no era difícil, pero te ofrecía importantes desafíos y no era corto, pero podías pasártelo en un par de horas. Esta maravilla de Konami va directo al jardín de los recuerdos de los nacidos a finales del siglo XX.