Descubre los pueblos más bonitos de Castilla y León
Resumen del contenido
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Carreteras cargadas de aire puro, tranquilidad y naturaleza, poder dar paseos junto al cauce de un río dónde tan solo se oye el murmullo del agua, caminar solo por calles desiertas, por las que apenas pasa nadie, sentir tus pasos retumbar en estrechas y pequeñas calles empedradas, un palacio, un castillo, un puente romano, una iglesia, una muralla… todo esto y mucho más es lo que puedes encontrar en Castilla y León.
Es una de las comunidades autónomas con más historia de España y en la que podrás disfrutar de algunos de los pueblos más bonitos que has visto nunca.
Excursiones en coche por Castilla y León
Castilla y León tiene mucha historia: batallas, guerras entre hermanos, traición, reyes, condes… durante muchos siglos, los personajes más famosos de nuestra historia han pasado por alguno de estos pueblos.
Aunque no están todos, queremos hacer una selección de los más bonitos que te podrás encontrar si realizas una escapada rural a Castilla y León para disfrutar de la tranquilidad, el buen comer, la cultura y las actividades en la naturaleza.
Castrillo de los Polvazares, a 38 minutos de León
Está en Astorga y muestra la arquitectura típica de la zona de la Maragatería en la provincia de León. Sus calles medievales y empedradas y sus espectaculares vistas al Monte Teleno te harán pensar que has viajado en el tiempo. Hay muchas ciudades medievales que podrás disfrutar en coche o moto en Castilla y León.
Muchas de las casas que encontrarás si das un paseo por sus calles conservan la estructura original y el trazado del siglo XVIII.
Las edificaciones de este pueblo tienen mucho que ver con la profesión de muchos de sus habitantes en siglos pasados: los transportistas de caballos.
Y para reponer fuerzas de un paseo inmerso en plena naturaleza, nada mejor que disfrutar de su gastronomía. No te puedes ir de Castrillo sin probar su Cocido Maragato, que se come al revés que en el resto de España: lo último, la sopa.
Baltanás, a 24 minutos de Palencia
Es posible que no hayas oído hablar de él, pero es una joya dentro de la impresionante provincia de Palencia. Baltanás fue un importante centro de comercio durante la Edad Media, tanto es así que los Reyes Católicos lo nombraron como Cabeza de la Merindad del Cerrato (comarca en la que se engloba).
En él podrás encontrar algo único, y es su espectacular barrio con influencias del románico palentino. En este descubrirás casas construidas dentro de la montaña.
Lo mejor que puedes hacer en Baltanás es perderte en sus calles y disfrutar de su multitud de plazas (La plaza Mayor es una auténtica delicia). Si quieres disfrutar de un día redondo en este pequeño municipio, no puedes dejar de visitar el interior del convento de San Francisco o el Hospital de Santo Tomás que se encuentra en un palacio del siglo XVIII. También es digno de mencionar su entorno verde y sus bodegas escavadas en las laderas de las lomas.
Si visitas Baltanás, tienes que probar uno de sus productos más típicos: el queso del Cerrato, un lujo para los amantes de este lácteo. Si lo que te gustan son los vinos, también existen rutas de vino por la comunidad que puedes llevar a cabo.
Arévalo, a 30 minutos de Ávila
Es uno de los pueblos más bonitos de España. Su casco antiguo está considerado como Bien de Interés Cultural, y no es de extrañar porque pasear por sus calles te hará pensar que te encuentras en otra época. Es uno de los máximos exponentes de la arquitectura mudéjar castellana en la que el rojo del ladrillo es el color imperante.
En su castillo construido entre los siglos XII y XVI residió la madre de Isabel la Católica durante sus últimos años de vida y la Reina Católica es uno de los personajes predilectos de la localidad. Tanto es así, que podrás ver una escultura a su figura junto a uno de los arcos de entrada en la ciudad amurallada. Dentro de este recinto encontrarás multitud de iglesias y palacios y una plaza mayor porticada impresionante.
En cuanto a su gastronomía, no puedes irte de Arévalo sin probar uno de sus asados típicos: el cochinillo o el cordero. Y para bajar esta comida, nada mejor que pasear junto al río por el Puente de Medina, también declarado Bien de Interés Cultural.
Peñafiel, a 44 minutos de Valladolid
Si eres un amante del vino, visita este pequeño pueblo cuna de la denominación de origen Ribera del Duero. Durante siglos ha sido una localidad muy importante en Castilla.
Su castillo comienza a construirse en el siglo X y su forma es una de las más originales que podrás encontrar (parece un barco). Cuenta también con una muralla que rodea el pueblo, mientras el castillo se erige imponente sobre el cerro.
Fue uno de los centros culturales y sociales más importantes durante la Edad Media, por lo que sus calles y sus plazas están llenas de edificios con gran interés artístico. Puedes, además de visitar sus iglesias y conventos, empaparte de su cultura vinícola en su Museo del Vino que se encuentra en el interior del castillo.
Puebla de Sanabria, a una hora y cuarto de Zamora
En la Navidad de 2018, fue reconocido con el galardón de Pueblo más Bonito y Bueno de España por una importante marca de dulces. Además, se encuentra dentro de la red de Pueblos más bonitos de España.
Puebla de Sanabria se sitúa en un marco natural incomparable. En lo alto de una colina, dominado un valle fértil y verde, como si de una cápsula del tiempo se tratara.
Subir por sus calles empedradas contemplando su arquitectura popular en la que la piedra domina el espacio te dejará sin aliento, no solo por sus cuestas, sino porque al llegar a su plaza mayor situada en la parte más alta de la colina, te encontrarás con un auténtico espectáculo de belleza, dominada por un impresionante castillo.
Puebla de Sanabria fue una de las propiedades de los Condes de Benavente en el Siglo XV y un importante núcleo político y social ligado al enorme poder de los Pimentel y a las guerras con Portugal.
Sus calles conservan el entramado original y muchas de sus casas son originales. No puedes dejar de pasear por sus calles y disfrutar de su tapeo. Pero si lo que quieres es disfrutar de la naturaleza nada mejor que acudir a una de las principales atracciones turísticas de la comarca sanabresa: el entrono natural del Lago de Sanabria, un lugar único en España.
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