El top de escenas emotivas de anime que te harán llorar
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Es imposible ver estos momentos sin emocionarse y que se te salten las lágrimas: este es el top de las escenas más emotivas de todos los tiempos del anime.
El anime nos ha brindado varios de los mejores momentos de nuestras vidas, pero también algunos de los más tristes. Hay escenas tan emotivas que nos han dejado mudos, nos han creado un nudo en el estómago que casi nos deja petrificados. Acordarse de ellas siempre es un trago duro, pero también un bonito recuerdo de aquel momento específico de la época en la que lo vimos por primera vez. Repasamos cuál es el top de escenas emotivas de anime.
Ha sido complicado elegir algunas y, lo que es peor, descartar otras. Como siempre, la selección es algo subjetiva, pero estaremos encantados de escuchar tu opinión al respecto.
Las escenas más tristes de anime
Vegeta se sacrifica para salvar a Goku, su hijo y la tierra
Nunca destacó por su empatía o su cariño, pero no hay ninguna duda de que Vegeta es el personaje que más crece a lo largo de la serie. Jamás dejó de lado su orgullo ni su personalidad complicada, pero supo adaptarse a la tierra sin avergonzar la raza saiyan.
Es complicado elegir una de las decenas de momentos emotivos de Dragon Ball, pero este se lleva la palma. Arrepentido de haber matado a tanta gente durante el torneo y viéndose responsable del nacimiento de Boo, el príncipe tiene claro que ha de ser él quien resuelva el entuerto. Y para ello, no duda en inmolarse, incluso sabiendo que ese será su final. El modo en que abraza a su hijo y le pide perdón por no ser cariñoso, la confesión de su respeto por Goku, su prueba de amor a Bulma… Gracias por tanto, rey.
La frustración de Gon
Killua y Gon vieron en primera persona como Kaito caía derrotado ante una de las hormigas más poderosas. Esa herida quedará para siempre en el corazón de ambos, que pelearon con todo su poder para entrar en la expedición que trataría de recuperar a su maestro. Pero tras perder, Gon no pudo evitar echarse a llorar. Se vio a sí mismo como alguien incapaz de cumplir lo que se propone, un ser débil que explota al sentirse frustrado de no poder ir más allá de lo que quisiera. Y la reacción de su mejor amigo es entrañable, dolido al verse incapaz de ayudarle.
Portgas D. Ace le salva la vida a Luffy
En el transcurso de la guerra de Marineford, Ace, tratando de evitar que un golpe de Sakazuki mate a su hermano, se interpone en su camino y recibe el golpe mortal. Antes de eso, le pide perdón por su comportamiento y por no poder verlo convertido en rey de los piratas. No llorar es casi imposible cuando le confiesa que él fue una de las grandes razones por las que quería vivir. Todo cambió para el sombrero de paja a partir de ese momento.
Parece que se ha puesto a llover…
La muerte de Maes Hughes fue uno de los mayores golpes que recibió la audiencia en Full Metal Alchemist. No solo por el dramático desenlace de su lucha contra Envy, sino por cómo se sucede el funeral, con la niña gritando que quería volver a ver a su padre y Roy Mustang confesando querer transmutar su cuerpo (como hicieran los hermanos Elric) y luego disimular su llanto de la forma más emotiva posible.
Hasta siempre, Itachi
Sasuke siempre juró vengarse de su Itachi. Nunca le perdonó que exterminara toda su clan y desde ese momento haría todo lo posible para acabar con él. Y la batalla que pondría fin a su vida no pudo ser más espectacular. El menor de los hermanos demostró estar a la altura de la batalla y que todos sus años de entrenamiento no fueron en balde.
Pero cuando creía que ya casi lo tenía, el mayor comenzó a usar sus mejores habilidades. Con un paso débil, pero firme, este se iba acercando poco a poco al otro, esquivando todos sus ataques. Ya frente a él, le confiesa todo lo que ocurrió hasta el momento y fallece a causa de una combinación del cansancio de la batalla y una enfermedad, no sin antes darle su amateratsu y quitarle la influencia que el orochumaru tenía sobre su cuerpo. Un héroe en toda regla.
Solo es un club
Ya lo decía Tsukishima: el voleibol es solo un club. Pero la serie tarda poco en demostrar lo contrario: las cosas tienen la importancia que las personas les damos y no hay una medida objetivamente justa. Por eso, una de las escenas más conmovedoras hasta el momento sucede tras la derrota de Aoba Johsai, donde los jugadores de tercer año se despiden de la competición escolar para siempre. Oikawa se postra ante ellos y les agradece haber estado a su lado en los últimos años.