Estas son las mejores peleas que hemos visto en Dragon Ball
⌚ 4 Min de lectura
Dragon Ball es uno de los mayores exponentes del género shonen: por si las habías olvidado, te mostramos las batallas más impactantes y espectaculares.
Es, indudablemente, una de las producciones más famosas de la tierra. Todo el mundo ha visto, aunque sea solo unos minutos, algunas escenas de Dragon Ball, algo que convierte la obra de Akira Toriyama en uno de los productos culturales más mediáticos de la Historia. Y una de las claves de su éxito fue, además del carisma de sus protagonistas, su puesta en escena, ofreciéndonos espectaculares batallas que nos quitaban el habla. Precisamente repasaremos las mejores para refrescar tu memoria.
La saga Dragon Ball incluye, hasta el momento, 4 series (basadas en sus respectivos mangas) y más de 15 películas, por lo que es bastante extensa. Es posible que nos dejemos alguna de tus favoritas, ¡ponlo en los comentarios y dinos por qué debería estar incluida en la lista!
Las peleas más increíbles de Dragon Ball
Vegeta vs Black Goku — Dragon Ball Super
Sin duda, uno de los momentos más espectaculares de la última serie de la saga. El príncipe de los Saiyan viaja al pasado para ayudar a su hijo, que se enfrenta a una amenaza mucho mayor de la que puede afrontar: el ayudante de uno de los dioses viaja a otro universo y le roba el poder a Goku y se rearma para acabar con la humanidad. Vegeta decide enfrentarse al Goku falso, demostrando que su nuevo poder de Super Saiyan Dios Azul es insuperable. Él tendrá un nuevo cuerpo poderoso, pero el orgullo y la fuerza son intrínsecos a la sangre de los guerreros y esta no puede copiarse.
Goku vs Piccolo Daimaoh — Dragon Ball
Hasta la aparición de este Piccolo, la serie parecía más desenfadada y alegre. Pero el rey de los demonios lo cambió todo, no solo matando a los amigos del protagonista, sino oscureciendo el aura que destilaban las batallas. Y su combate en el Torneo de Artes Marciales frente a Goku fue espectacular y obligó a Goku a traspasar por primera vez la línea: o lo mataba, o la vida en la tierra podría verse amenazada.
Trunks vs Goten — Dragon Ball Z
En el arco de Boo, uno de los estrenos más llamativos fue el de Goten, el segundo hijo de Goku. Trunks también se presentó aquí, pero ya conocíamos su versión alternativa del futuro. Lo que jamás podíamos pensar es que ambos acabarían siendo tan amigos, dando lugar a una de las amistades más reales y bonitas de la serie, máxime sabiendo quiénes son sus padres, de los cuales también han heredado su rivalidad, como se muestra en la primera batalla oficial entre ambos: los dos talentosos guerreros muestran todo su potencial y libran uno de los combates más igualados y frenéticos.
Gohan vs Cell — Dragon Ball Z
Es sin duda una de las mejores peleas de anime. Era el momento en el que Goku le daría el testigo a su hijo —o así lo quería el propio Toriyama—. Cuando nadie parecía poder con Célula, el protagonista de la serie pensó que la única forma de acabar con él sería sacar todo el potencial de Gohan… y así fue, a pesar de que un despiste le costaría la vida a su padre. Fue una batalla sin cuartel: el super saiyan 2, con sus magníficos efectos eléctricos, lució a la perfección y la espectacularidad del momento se guardó en la retina de sus espectadores para siempre. Y el final estuvo a la altura del desarrollo del combate: Goku bajó de los cielos a ayudar a su hijo a completar el Kamehameha y Vegeta, en su último aliento, contribuyó a que la balanza se decantara sobre el joven guerrero.
Gohan vs Bojack — Dragon Ball Z: Los guerreros de plata
Fue una amenaza inesperada. De repente, unos luchadores del espacio llegaron en lo que empezó siendo un día de júbilo y diversión y acabaron uno a uno con los poderosos guerreros Z. Ni siquiera Vegeta logró plantarles cara más allá de obligar a su líder a transformarse en su fase final. Cuando todo parecía perdido, Goku se salta las normas para salvar a Gohan y activar de nuevo su máximo poder. Tras ello, se deshizo de sus rivales en menos de lo que canta un gallo en un combate desigual y digno de ver repetido una y otra vez.
Gogeta vs Broly — Dragon Ball Super: Broly
El reboot del personaje de Broly —o, mejor dicho, su canonización— ha sido una de las mejores producciones de la historia de la franquicia. En primer lugar, porque llegó con un estilo de animación fresco y diferente a lo que habíamos visto hasta el momento y, después, porque todos los combates librados en la duración de la película tenían una cosa en común: espectacularidad, alto nivel de detalle y acción vibrante y descarnada.
Los protagonistas no pudieron hacerle frente uno a uno al denominado saiyan legendario, así que tuvieron que fusionarse para acabar con él. Además, ni que hablar tiene de todo el debate que surgió tras la película: ¿por qué Gogeta siempre sonríe al terminar un combate?
Goku vs Majin Vegeta — Dragon Ball Z
Goku y Vegeta tienen momentos increíbles desde que se conocieron, pero las mejores interacciones las vivieron durante el arco de la saga de Boo. El combate que ambos libraron contra el monstruo rosa fue sobresaliente, pero la matrícula de honor se la lleva el que tomaron precisamente para invocarlo, cuando el príncipe de los saiyan se sincera ante su igual y le cuenta la verdad de por qué se dejó poseer: estaba harto de su vida común en la tierra, de ser un segundón, de dejarse salvar. Tenía que volver a sus raíces, volver a sentirse un demonio, que lo único que le importara fuese ser el más poderoso.
La pelea que sigue a dicho diálogo fue increíble, sin ningún tipo de piedad y sacando lo mejor de cada uno. El desenlace dejó también una de las muertes más recordadas de la serie: Vegeta, que antes dejó inconsciente a Goku para arreglar él mismo el desaguisado que provocó, se sacrifica buscando la redención y para salvar a su familia, a su amigo y a la tierra.