Las frutas del diablo más potentes y rotas de One Piece
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Las frutas del diablo son alimentos del universo One Piece que otorgan poderes a aquellos que las consumen: te mostramos cuáles son las más poderosas.
Todo lo que parecía ser aleatorio en One Piece tiene un sentido. Luffy no se ha convertido en un humano con poderes extraordinarios de la nada, sino que como muchos otros en la serie, consumió un alimento que lo volvió así. Las frutas del diablo son las principales partícipes de convertir a seres completamente normales en superhéroes. Aunque no todas hacen el mismo efecto: en función de la especie, estas alterarán un tipo de características u otras de su consumidor.
Además de nuestro querido protagonista, que puede estirarse como una goma, hemos visto a otros personajes a lo largo de la historia cuya fruta del diablo los volvió un poderoso enemigo a batir: Ope Ope y sus poderes de manipulación de objetos; Tori Tori y el poder de convertirse en un fénix; Ito Ito y el manejo de cadenas; Magu Magu y el control del fuego; o Gura Gura y la generación de terremotos son solo algunos de los ejemplos que se ven a lo largo de la historia.
A continuación, repasamos cuáles son las frutas del diablo más fuertes de las 183 que existen actualmente.
Las frutas del diablo más poderosas de One Piece
Kozuki Momonosuke
De tipo Zoan, es una de las pocas frutas del diablo artificiales, creada por el doctor Vegapunk, que trabajaba para la Marine. Su consumo permite al usuario convertirse en un dragón oriental, que vuela deslizándose entre las nubes que él mismo puede generar. Como las frutas naturales, hace a su consumidor débil al agua. Momonosuke todavía no ha explotado el potencial de sus poderes, aunque solo poder adquirir la forma de un dragón basta para incluirlo en la lista.
Soru Soru no Mi
Esta Paramecia está completamente rota, ya que si bien es un poder que en combate puede que no esté desequilibrado, en líneas generales es una fantasía: su consumidora, Big Mom, puede acortar el tiempo de vida de todos los humanos que estén cerca de ella y manipular su alma. Incluso puede quitarse pedazos de su alma para darle vida a seres inertes.
Akuma no Mi
Otra Paramecia. Esta la consumió Karasu, el comandante del Ejército del Norte de los revolucionarios. La fruta le permite convertir su cuerpo y la ropa en cuervos, algo que lo vuelve casi invulnerable porque puede huir y escapar fácilmente. Ha demostrado su potencial en varias ocasiones, como cuando le quitó las espadas en apenas segundos a todo el ejército de los Piratas de Barbarrosa. Puede utilizar los cuervos para transportar a personas.
Kage Kage no Mi
Esta Paramecia es tan poderosa como ilimitada. En teoría, te da pleno control de las sombras de los humanos, pero sus implicaciones van más allá de eso: puede cambiarse con la sombra de otros, puede absorberlas y así obtener todo el poder de su poseedor original e incluso trasladarlas a un cadáver para crear zombis. Esta fruta la consumió Gekko Moriah, capitán de los Piratas de Thriller Bark y una de las recompensas de captura más elevadas de los Siete Mares.
Toshi Toshi
Otra Paramecia cuyo poder es sencillo, pero poderoso. Su consumidora es Jewelry Bonney, la capitana del grupo que lleva su apellido y una de las integrantes de la peor generación de piratas de la historia. Esta puede controlar su edad o la de otras personas, algo que le permite quitarse de en medio a enemigos envejeciéndolos.
Magu Magu no Mi
De tipo Logia, da a su consumidor el control absoluto del magma: puede generarla cuando quiera, manipularla e incluso convertirse en ella. Su último poseedor fue Sakazuki, almirante de la flota del cuartel general de la Marine. Su poder supera a otras frutas similares, como la Mera Mera de Ace y su hermano Sabo, que controlan el fuego. Puede incluso cambiar el clima al desencadenar todos sus poderes.
Hie Hie no Mi
Esta fruta Logia permite a su poseedor producir, manipular e incluso transformarse en hielo. Su actual dueño es Aokiji, que abandonó la Marina tras ser derrotado por Sakazuki y ahora trabaja con los Piratas de Barbanegra. Es de los pocos que se ha comido una fruta que posee cierta resistencia a ella, pudiendo usar sus poderes incluso cuando ha caído a ella.
Buki Buki no Mi
Esta Paramecia permite a su consumidor transformar cualquier parte de su cuerpo en un arma. Simple, pero efectiva y potente. Su poseedora, Baby 5, la ha usado para crear armas de todo tipo, incluso explosivas. A pesar de detonarse a sí misma, esta no se hacía daño.