El final de Ash Ketchum en el anime de Pokémon

Los finales, por felices que puedan ser, acaban volviéndose tristes. Despedir a alguien es un verdadero tormento y más si se trata de una persona que ha estado acompañándote a lo largo de tu vida. Afortunadamente no hablamos de alguien real, pero eso solo lo hace un poco más llevadero: Ash Ketchum, uno de los grandes protagonistas de la infancia de niños de todo el mundo, deja el anime de Pokémon tras más de un cuarto de siglo como personaje principal. El maestro pokémon ha sido testigo de cómo su audiencia ha ido madurando y su despedida se ha venido posponiendo en los últimos años.
El pasado noviembre de 2022, el natural de Pueblo Paleta logró por lo que ha estado más de un cuarto de siglo peleando: alzar el trofeo que le acredita como campeón nacional, una tarea que ha intentado en numerosas ocasiones, sin demasiado éxito. Y todo ese viaje ha sido recordado en Aim to be a Pokémon Master, la serie que ha servido de epílogo a toda su historia y en la que ha rememorado el camino recorrido junto a muchos compañeros, en especial su Pikachu.
En esta última temporada el entrenador pokémon se reencuentra con la mayoría de los pokémon capturados en las 8 regiones que ha visitado: Charizard, Bulbasaur, Squirtel, Bayleef, Quilava y muchos más de aquellos compañeros que han estado con él a lo largo de su odisea personal. Está claro que es un llamamiento a todos aquellos que han seguido la serie desde el principio, con guiños a los momentos más señalados de cada temporada. El último capítulo se emitió en Japón el pasado 24 de marzo y llegó a los pocos días al resto del mundo.

El testigo del legendario Ash Ketchum lo recogerán dos desconocidos, Liko y Roy, los próximos protagonistas del anime de Pokémon que recorrerán Paldea (Vamos, España), la región de Pokémon Púrpura y Escarlata.

Ash Ketchum y la difícil tarea de ser la cara de Pokémon

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Fuente: Crunchyroll

No todo ha sido felicidad y alegría a lo largo de las últimas décadas. En lo relativo a los videojuegos, Pokémon siempre ha sido un superventas y su importancia nunca ha estado en entredicho, algo que no ha ocurrido con el anime, bastante criticado por, en opinión de muchos, no estar a la altura de los juegos. No ayudaron las comparaciones con Digimon, por ejemplo. Y en todo este tiempoAsh Ketchum ha sido cuestionado bajo la sombra de una estrategia que al manga le funcionó bien: ¿y si se cambia de protagonista en cada edición/temporada?
Acusado de ser poco carismático, también ha tenido que enfrentarse al estigma de perder casi todas las ligas pokémon en las que participaba, algo muy poco habitual en los shonen, donde el protagonista sufre escasas derrotas que le aúpan rápidamente hasta la tan ansiada recompensa. En el caso de Ash tuvieron que pasar 24 temporadas y 1.217 capítulos (¡Tiembla, One Piece!), exceptuando los casos de la Liga Naranja, diseñada ad hoc para el anime, y la Liga de Alola, sin campeón en el momento en el joven de Pueblo Paleta gana ya que disputó su primera edición.

La figura de Ash Ketchum se sale de lo establecido en el anime, un acercamiento al espectador, que es más el humano acostumbrado a las derrotas y menos el héroe que considera algo corriente salir vitoreado de un estadio que corea tu nombre. Sería un error valorarlo por su última victoria: su verdadera magia reside en que cayó muchas veces y nunca escatimó en esfuerzos para pelear en sus siguientes intentos. Es la viva imagen de su audiencia frustrada por no obtener las recompensas que otros protagonistas de animes sí consiguieron. De ahí que su adiós sea tan triste… a pesar de haber sido siempre tan criticado.

Los intentos fallidos de Ash de ganar la Liga Pokémon

La victoria de Ash es la más meritoria de todas, ya que no se trataba de una Liga al uso, sino de la Liga de las Ligas: todos los campeones de cada región se reunían para demostrar cuál era el mejor de todos. Y ahí se alzó el protagonista, incombustible y con la determinación necesaria para dejar atrás su nefasto historial.

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Fuente: Crunchyroll

Su primera Liga Pokémon fue la Liga de la Meseta Añil, la de Kanto. Tras ver cómo su principal rival, Gary, caía derrotado en dieciseisavos, el protagonista perdió en la siguiente ronda frente a Ritchie, otro de esos entrenadores que lo acompañaron en el camino y que finalmente lo superaron por culpa de la rebeldía de su Charizard, que se negó a pelear con un simple Pikachu. Pudo redimirse poco después ganando la Liga Naranja.

Su segundo intento, el del Congreso Plata de Johto, nos dejó uno de los duelos más esperados: el Gary contra Ash. El Blastoise del primero sucumbió (por extraño que parezca) al Charizard, ya obediente, del segundo. Pero su sueño vuelve a acabar antes de lo prometido, en cuartos de final, al perder contra un Harrison que utilizó a Blaziken, un pokémon de una generación que en ese momento no había salido aún.
La Liga de Hoenn fue aún más dolorosa. De nuevo en cuartos, Ash se enfrentaba a Tyson, que tenía un Meowth que jugaba con la skindel gato con botas. En el duelo final, este y Pikachu realizaron un ataque Cola Férrea a la vez que dejó al segundo KO sobre el cuadrilátero.

La derrota más indignante de Ash la vivimos en la Liga de Sinnoh, máxime cuando poco antes salió campeón del Frente Batalla. La historia parecía cambiar cuando Ash consigue alcanzar semifinales superando a Polo, principal rival de aquella temporada. Pero lo que ocurrió a continuación nadie lo pudo esperar: su siguiente enfrentamiento sería contra Tobias, un entrenador al que le bastaron 2 pokémon para dejarlo sobre la lona. Pero qué dos pokémon: Latios y Darkrai. Fue el único que al menos logró derrotar a Darkrai, todo un logro que supo a poco.

A partir de la Liga de Teselia todo se vino abajo. Muchos creyeron que era el momento definitivo para ganar, pero lejos de repetir semifinales, Ash perdió en cuartos frente a un joven Cameron que, para colmo, solo tenía 5 pokémon. Pero claro, ¿quién se esperaba que Riolu evolucionara a Lucario en mitad del combate?

La Liga Pokémon de Kalos fue la más espectacular. El anime había superado las expectativas del videojuego y, por primera vez en mucho tiempo, Ash había conectado con uno de sus Pokémon como ya lo hiciera con Pikachu, hasta el punto de que… ¡logró una transformación nueva con él! Gracias a la metamorfosis afectiva, su Greninja fue tan poderoso que lo llevó en volandas a la final, pero que no fue suficiente para derrotar a un Charizard X.

La Liga de Alola fue la primera victoria, aunque al ser la primera y tener un formato completamente diferente, no fue tan sonada. Pero esta fue suficiente para darle un billete al Campeonato Mundial Pokémon, en el que Ash derrotó al resto de campeones de regiones, incluyendo a Lionel y Cinthia, considerados por todos como los mejores entrenadores pokémon. Por fin Ash cumplió su sueño y todos los que lo vimos crecer finalmente nos alegramos por él.